Comienza un nuevo curso, el 2020/21, un curso extraño, en plena crisis del COVID19, un curso que nos va a obligar a hacer las cosas diferentes, a lo mejor no mejores pero espero que tampoco peores. Intentaré dar todo lo que pueda para que sea una gran experiencia para los estudiantes a los que les ha tocado vivirla.
En el Curso 2020/21, me he encontrado un nuevo grupo formado por 41 estudiantes (11 chicas y 30 chicos), parece que con muchas ganas de aprender la materia de Comercio Electrónico.
Mis primeros contactos con este grupo de la asignatura de Comercio Electrónico se realizaron por medio formación online, empleando para ello la herramienta MS Teams. Lo primero que sentí fue frialdad, no los conocía y ellos no me conocían. Fue extraño. En mis primeras clases les expliqué la forma de trabajar en la asignatura y un poco en qué consistía el aprendizaje basado en proyectos y el aprendizaje servicio, y le mostré lo que se había conseguido otros cursos:
- Centro Ocupacional el Lucero (Alhama de Granada), Curso 2015/16.
- Protectora de Animales la Bienvenida (Ciudad Real), Curso 2016/17.
- Asociación Santa Águeda de Mujeres Afectadas por Cancer Mama y Ginecológico (Puertollano), Curso 2017/18.
- Asociación VivELA de Amigos, Familiares y Afectados de ELA (Ciudad Real), Curso 2018/19.
- Asociación de prematuros de Ciudad Real «Pequeños Luchadores» (Ciudad Real), Curso 2019/20.
Los estudiantes se mostraron entusiasmados por hacer algo útil también este curso, aún siendo conscientes de las dificultadas que nos podríamos encontrar. Especialmente, por la forma de trabajar en equipo en el aula, que lo tendríamos que hacer a través de MS Teams. Esto tiene muchos riesgos, ya que puede haber miembros de los diferentes equipos que no aporten lo que deberían, y que se escaqueen haciendo otras cosas. No obstante, esta forma de trabajar es posible que se la encuentren en un futuro, por lo que tampoco está mal que se enfrenten a ella en la Universidad. Mi reto aquí es intentar que aprendan a usar ese medio para compartir ideas y trabajar, y ser capaz de identificar y valorar el trabajo de cada uno de los miembros del grupo, probablemente también lo tenga más complicado al no poder acercarme a sus mesas.
Hasta ahora, en otros cursos, el proyecto social en el que trabajábamos, lo proponía yo, y todos los grupos de estudiantes de la asignatura trabajaban en el mismo. Este año he dado libertad para que cada grupo elija la asociación para la que quieren trabajar o colaborar. Creo que puede ser más enriquecedor para mis estudiantes a corto y largo plazo, y además nos permite ayudar a más asociaciones o pequeños emprendedores. También es cierto que aumenta el riesgo de no cumplir el objetivo en alguno de ellos, pero lo asumimos.
Los diferentes grupos que se han formado han contactado con diferentes asociaciones, a las que les gustaría ayudar dándoles visibilidad y proporcionándoles una herramienta de utilidad para lograr sus objetivos. De este modo, los proyectos en los que vamos a trabajar son:
- Grupo CONFIANZA – Banco de alimentos de Alhama de Granada.
- Grupo EMPATIA – Asociación Minero Blanco de Puertollano.
- Grupo GENEROSIDAD – Pizzeria La Torre de Pizza de Argamasilla de Alba.
- Grupo GRATITUD – Asociación Amor Gatuno de Valdepeñas.
- Grupo HONRADEZ – Banco de alimentos de Puertollano.
- Grupo HUMILDAD – ACTÜA Asociación defensora de animales de Villanueva de los Infantes.
- Grupo PACIENCIA – Asociación de Familias de Niños con Cáncer de Castilla-La Mancha (AFANION).
Les he dado el visto bueno a todos los proyectos, me parecen muy interesantes ya que van a permitir a las asociaciones tener una web que les dará visibilidad y ayudarán a conseguir los objetivos que se hayan planteado como asociaciones o como pequeñas empresas (este año volvemos a tener una). En cualquier caso estamos haciendo un trabajo académico, y será el cliente el que al final decida si se quieren quedar o no, con lo que los estudiantes hayan realizado. Si el cliente (asociación) considera que el producto desarrollado por los estudiantes les representa y lo ven útil en el futuro seguro que se la quedan. Para nuestros estudiantes el reto es conseguir desarrollar un producto que tenga las funcionalidades necesarias, enamore al cliente, tanto que se lo quieran quedar. Si lo consiguen tendrán algo que añadir a su curriculum, más concretamente a su porfolio profesional, estoy seguro de que será de utilidad cuando comiencen a buscar trabajo.
Y recordad es un trabajo de equipo, si uno no arrima el hombro el peso caerá sobre algún compañero y tendréis más dificultad para conseguir el objetivo como grupo. Esta forma de trabajar es útil si todos los miembros os esforzáis. ¡Animo y a por ello!