Ayer les propuse a los alumnos un ejercicio, que se puso en un examen de años anteriores, aunque esto no se lo dije… Hoy al preguntar quien lo había intentado solucionar, todos los alumnos levantaron la mano, aunque sólo había dos propuestas de solución (la de Alberto y la de Luis)… No esperaba más, están aprendiendo y lo que pretendía es simplemente que sintieran curiosidad por ver la solución, y eso creo que se ha conseguido…
Una de las soluciones que se ha presentado, la de Alberto Crespo, no ha sido válida, los mismos alumnos lo han demostrado. Y en ese momento Pablo León ha propuesto una nueva solución. ¡Esto me ha gustado! Ya que significa que ayer Pablo le dio unas cuantas vueltas al problema y hoy se le ha encendido la bombilla. Su propuesta inicial tenía problemas pero sobre la marcha los ha ido arreglando. ¡Perfecto! Enhorabuena, buen trabajo.
La otra propuesta, la de Luis Cabanero, estaba también perfecta, ha realizado un excelente trabajo.
Espero que la motivación se quede con nosotros un tiempo… Y ahora una imagen de la inspiración de Pablo…