Para los habitantes actuales del planeta resulta muy difícil de entender, pero hace 2.000 años viajar llevaba mucho tiempo. Y de hecho, la cercanía al mar acortaba sensiblemente los tiempos de viaje. Así, el imperio romano, bien conocido por sus calzadas públicas que conectaban todos los puntos del imperio, tenía unos tiempos de viaje que a nosotros nos parecen asombrosamente largos. El enlace del final de esta entrada lo muestra calculando el tiempo de viaje entre dos puntos cualesquiera del imperio. Es una página web de la universidad de Standford, que calcula tiempos medios de viaje en tiempos del imperio romano según distancia y costo, porque no es lo mismo ir andando que con montura. Esto último es más caro, pero también más rápido.
Jugueteando con el mapa, se puede ver dentro de la península ibérica que ir desde la actual Salamanca hasta la ciudad de Flavius Brigantum, situada en la actual provincia de la Coruña, llevaba 15 días, mientras que ir por mar desde Flavius Brigantum hasta Gades, la actual Cádiz, llevaba la mitad del tiempo, siete días. Se podía ir por mar. No es de extrañar que incluso hoy en día, sean las zonas cercanas a la costa las que mejor se pueden comunicar y las que están más pobladas.
En enlace a la aplicación web es: Orbis: The Standford Geoespatial Network Model of the Roman World.