Mañana tendrá lugar en el Paraninfo de la UCLM el acto de graduación de la XIV Promoción de Graduados en Medicina de la Facultad de Albacete.
Siempre que he podido, he asistido. Me he perdido muy pocas… pues me satisface (y emociona) comprobar lo que han cambiado y crecido aquellos alumnos y alumnas que recibí, 6 años antes, en primero, cuales corderitos camino del matadero tras el recibimiento del Decano, ahora ya convertidos, nada más y nada menos, que en médicos.
En la primera sesión del Módulo 0 les explico las herramientas de comunicación on-line que deberán utilizar. Pero aprovecho para decirles que han elegido una carrera que no terminará 6 años después, pues su formación como médicos, no acabará nunca. Siempre deberán aprender, me gusta más que estudiar. Sí, estudiar no le gusta a nadie, pero aprender es otra cosa… y permite diferenciar a dos tipos de personas. Yo huyo de las que no quieren aprender, de las que se conforman con lo que les dice la tele o el grupo Prisa: que si CR7 o Messi son unas bellísimas personas, o si el Partido Podrido es lo más… Y busco y disfruto de una conversación con quien, a lo mejor sin formación, desea seguir aprendiendo, cuestionándose cosas pero confiando en lo que le transmites, con la curiosidad y el interés que, por ejemplo, se recoge en el brillo de los ojos de mis hijos cuando les digo que vamos a hacer algún experimento. No sé si consigo mis objetivos pero, en las asignaturas que imparto, en primero y tercero, intento que no piensen en estudiar sino en aprender.
Además me empeño en que sean críticos con lo que les tratamos de enseñar y con cómo se lo tratamos de enseñar. Mañana me espera un día emocionante. El alumnado de esta XIV me ha propuesto para una mención junto a otros compañeros y compañeras. Dudo que haya mayor reconocimiento a un profesor que el que te pueden ofrecer tus propios alumnos y alumnas. Ese reconocimiento es por algo que amo, que me apasiona, que me divierte y me satisface más que pocas cosas en la vida y que tengo la inmensa suerte de poder desarrollar con los mejores estudiantes del país. Y no, no es fácil dar clase a estos increíbles estudiantes que son críticos, que exigen calidad y claridad. Lo fácil es llegar, que no haya casi alumnos en clase, soltar el rollo y dejarse llevar… fácil y frustrante. Pero los de Medicina son excelentes, comprometidos y responsables, sacan adelante cualquier cosa incluso a pesar de algunos profesores. Pero eso sería aburrido. A mi me divierte que sepan que su duda por correo, Facebook, Twitter o Campus Virtual será respondida lo antes posible, generalmente antes de que se levanten. Me gusta innovar, los clickers, interactuar con ellos más allá del aula, en redes sociales… Nunca me negaré a impartir un seminario que ellos mismos demandan, ¡aunque sea de Estadística! o aunque me lo pidan dos.
Y ahora van y, todo eso que hacía por pura satisfacción personal, sin buscar reconocimiento o mérito, lo convierten en una mención, en ese reconocimiento sincero, en ese mérito que la ANECA y los que redactan los baremos de acreditación, nunca sabrán valorar, ni sentir, ni imaginar. Así que, gracias. No era necesario pero da gustete. Os deseo que nunca perdáis la pasión por hacer las cosas que deseáis, que no perdáis las ganas de aprender, que viajéis y que, cuando nos veamos en el futuro, si no os reconozco, me digáis ¡eh Nájera! Gracias.