TODOS SOMOS IGUALES

La institución educativa deja de ser el único canal mediante el que se entra en contacto con el conocimiento y con la información.

A su vez, deja de identificarse exclusivamente con el ámbito estado-nación e ingresa en la esfera de globalización. Por lo tanto, aparece la necesidad de crear nuevos principios o bases curriculares:

  • – Democratización: igualdad de oportunidades.
  • – Descentralización: asignarle a las escuelas el protagonismo, que tengan la posibilidad de desarrollar una educación en función de las necesidades y posibilidades del niño y del contexto.
  • – Atención a la diversidad: el niño con necesidades particulares tendrá una atención particular debido a sus necesidades pero no será excluido de su entorno. Se debe normalizar al máximo las necesidades de los niños, hacerlo en igualdad de condiciones sin sacarlo de clase en ningún momento. Pero no todo es absoluto, hay niños que necesitan un apoyo mas especifico. Es más favorable un trabajo individual en pequeños grupos.
  • – Enseñanza comprensiva: escuela inclusiva. Se basa en un modelo educativo que busca atender las necesidades de aprendizaje de todos los niños, jóvenes y adultos, haciendo especial énfasis en aquellos que son vulnerables a la marginalidad y la exclusión social.
  • – El aprendizaje cooperativo: es un enfoque que trata de organizar las actividades dentro del aula para convertirlas en una experiencia social y académica de aprendizaje. Los estudiantes trabajan en grupo para realizar las tareas de manera colectiva.
  • – Interculturalidad: en Irlanda los niños extranjeros reciben clases en el idioma materno, y clases en inglés. No hay que discriminar a nadie porque tenga una procedencia distinta.
  • – Globalización e interdisciplinariedad: contenidos, conceptos, procedimientos y actitudes. Este principio es interconectar los conocimientos y las especializaciones. En Educación Física hay profesores que necesitan dar los conocimientos propios de su asignatura pero necesitan conocer las bases de la Educación Infantil.

Haciendo referencia al principio de Atención a la diversidad, se debe tener en cuenta que es posible que los niños se pregunten por qué alguno de sus compañeros tiene otra profe que le ayuda y él no, o por qué están más pendiente de él que de los demás.

Una de las maneras con las que podemos explicarle qué le ocurre a estos niños con necesidades específicas es a través del cuento  «El cazo de Lorenzo»:

Lorenzo es un niño que siempre arrastraba un cazo detrás de él. Un día, el cazo se le cayó encima sin saber por qué y se hizo mucho daño en la cabecita. A partir de ahí, Lorenzo ya no era del todo como los demás. Necesitaba mucho cariño, era muy sensible. Pero tenía un montón de cualidades, le encantaba escuchar música, siempre estaba ayudando a sus amigos, cuidaba muy bien de su gatito…
Pero a menudo, la gente sólo podía ver ese cazo que arrastraba por todas partes y lo veían bastante raro, ¡incluso un poco alarmante!.
Su cazo le complicaba la vida. Tenía que tener mucho cuidado porque siempre se le atascataba en todos lados.
Poca gente se daba cuenta de que Lorenzo tenía que hacer el doble de esfuerzo que los demás.
A él le gustaría librarse de ese cazo, pero sabía que era imposible.
Un día, estaba tan harto que decidió esconderse y quedarse ahí durante mucho tiempo. Poco a poco la gente se iba olvidando de él, nadie le preguntaba nada ni le hacían caso.
Pero las cosas no son así de sencillas, y afortunadamente existen personas extraordinarias.
Basta con cruzarse con una para volver a tener ganas de sacar la cabeza del cazo. Esta persona le ayudó a sacar provecho a sus puntos fuertes, a expresar sus miedos y sobre todo le puso solución a su cazo. Le regaló una mochila donde poder meterle. Así sería más discreto y ¡ya no se atascaría en todas partes!
Por fin, Lorenzo pudo jugar con los demás y ahora le encuentran un montón de cualidades.
No obstante, Lorenzo siguió siendo el mismo.


Muchas veces ignoramos a estas personas por miedo, por no saber cómo tratarlas, por no equivocarnos… Pensamos que viven tristes, sin esperanzas, sin metas que alcanzar. Pero ellos son los únicos capaces de enseñarnos a reír, llorar, bailar, tener sueños, jugar, etc.

Poseen una capacidad enorme de superación y nos enseñan a ver que TODOS SOMOS IGUALES.

Sofía Esteban Alonso
2ºA Educación Infantil