“Hace un tiempo me encontré un artículo sobre la posibilidad de hacer un estudio diferenciado de la prueba de Lectura, Escritura y Aritmética (LEA) en alumnos con necesidades educativas especiales. Hasta ahora, los alumnos de 2º de primaria de la Comunidad de Madrid que realizaban esta prueba la elaboraban todos por igual, sin tener en cuenta las necesidades que presenta cada niño. Bajo mi punto de vista, y como docente creo que es una medida que debería haberse llevado a cabo desde hace ya mucho tiempo. Es sabido que los niños que presentan dificultades de aprendizaje no van a alcazar los mismos resultados que los niños que no tienen estas dificultades, es más, los datos obtenidos no serían reales ya que los sujetos de estudio no se encuentran bajo el mismo baremo. No me parece tampoco lógico ya que los objetivos curriculares de estos niños han sido adaptados para poder llevarse a cabo.
En la escuela, el niño, dependiendo de sus necesidades especiales, realizará las mismas tareas que el resto, las mismas tareas que el resto pero adaptadas a sus necesidades, o puede que realice otras diferentes; con lo cual no podemos presentarle luego una prueba, ya sea de lectura, escritura o artimética igual a la del resto de sus compañeros porque lo único que conseguiremos serán resultados negativos en su nivel de adaptación, en su autoestima…
Pero como bien dice la Asociación de personas con Trastorno Especifico del Lenguaje de Madrid (ATELMA), aunque hay muchas personas que tienen este problema, los organismos no muestran el apoyo suficiente y las familias se sienten solas.
¿Qué podemos hacer…? Cada uno deberíamos pensar que está en nuestra mano para cambiar esto.”
Yolanda Largo Fernández
Educación Infantil.