Míralo con otros ojos. Videojuegos.

Míralo con otros ojos
VIDEOJUEGOS
Más allá de la teoría de que los videojuegos fomentan adicción y violencia entre los jóvenes, debemos tener en cuenta que no todos cumplen estas características. El ocio electrónico ya no es cosa de adolescentes  (la media se aproxima a los 40 años), ni la mayoría de los títulos son violentos, solo un pequeño porcentaje de los videojuegos publicados son para mayores de 18 años.
Son muchos los centros educativos que deciden integrar los videojuegos en el aula, como los colegios públicos Henares y Ciudad de Jaén que llevaron a cabo los talleres multimedia durante el curso 2006-2007  con alumnos de segundo y quinto de educación primaria, debido a sus múltiples ventajas tanto en el ámbito del aprendizaje como en el ámbito social. 
Está demostrado que los alumnos aprenden mejor si se les enseña mediante juegos que cuando se utilizan las clases convencionales, esto hará que podamos conectar la escuela y los contextos de ocio infantil generando una alta motivación y estrategias innovadoras de aprendizaje.
Otra de las ventajas de los videojuegos es que facilitan la integración entre los propios alumnos, ya que alumnos con problemas de movilidad pueden jugar en igualdad de condiciones con sus compañeros. Sí que es verdad que la mayoría de los niños de hoy en día pasan horas y horas frente a los videojuegos (sabemos que tanto profesores como padres debemos educar el uso de estos) pero también debemos tener en cuenta que estos les ayudan a relacionarse con los demás.
No debemos olvidar la gran ventaja de los videojuegos en Educación Infantil ya que son un gran ejercicio de psicomotricidad fina, hacen que niños y niñas de 3-5 años que llegan al colegio sin fuerza alguna en las manos poco a poco vayan fortaleciendo los músculos de estas.
Por otra parte, cabe destacar que los videojuegos contribuyen a la eliminación de la barrera intergeneracional e intercultural, cuando adultos y niños juegan y aprenden juntos, esto supone  además “nuevos retos educativos para los padres”. Según el experto Bringué “los jóvenes van por delante en conocimiento y uso de estas nuevas pantallas, lo que sitúa a los progenitores en desventaja, y se puede llegar a cuestionar su autoridad para ejercer cualquier mediación”.
Algo que se debe de tener muy en cuenta son las horas que dedican los niños a estar frente a los videojuegos, datos extraídos del INE confirman que los niños entre 5 y 9 años pasan más de una hora y media al día utilizando estas tecnologías y esto aumenta en el fin de semana utilizándolos aproximadamente 2 horas. Pese a estos datos solo un 7% pasan más de tres delante de una pantalla.
Para concluir pienso que los videojuegos pueden llegar a tener una influencia positiva en la educación de los niños y, utilizados de forma moderada, no perjudican a su rendimiento académico, por eso la función de padres y profesores es educar sobre el uso de los videojuegos y estar informados sobre los juegos que los niños utilizan. Los videojuegos son una herramienta muy útil para padres y docentes ya que es algo que despierta interés en los niños.
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Cristina Testillano Oset—cristina.testillano@alu.uclm.es