Fundación, por Isaac Asimov

Una pistola atómica es un buen arma, pero puede disparar en ambas direcciones

Salvor Hardin, primer alcalde de Términus

Con este libro quiero comenzar una nueva serie de artículos en los que hablo de algunos de los libros que, de alguna manera, han resultado fundamentales en mi vida.

Y para hacer eso, nada mejor que comenzar con el libro «Fundación», de Isaac Asimov. Es el primero de una serie bastante larga, con seis o siete libros de calidad irregular, decayendo bastante en los últimos. Pero este primero…

Narra la historia de un futuro imperio humano que se extiende por la galaxia y que está llegando a su fin debido a fuerzas históricas que impiden su desarrollo o supervivencia. Justo en esos momentos, una de las mentes más brillantes de todos los tiempos, un científico llamado Hary Seldon desarrolla una teoría mecanicista del devenir humano para grandes poblaciones(1) que llama psicohistoria(2). Es decir, logra predecir el comportamiento de grandes grupos de población a lo largo del tiempo, asignándoles diversas probabilidades a acontecimientos futuros. Y se da cuenta de que al imperio galáctico le quedan muy pocos años de vida, no más de treinta antes de derrumbarse. Después de su derrumbe, según sus ecuaciones, habría que esperar un tiempo de 10.000 años para que surja otro nuevo imperio, y pretende reducir este lapso de tiempo en un factor 10 con el establecimiento de una fundación dedicada a la recopilación del conocimiento humano en una gran enciclopedia electrónica(3). El desarrollo del libro es la historia de los primeros años de esta fundación, y como interacciona con los restos cada vez más moribundos y empequeñecidos del imperio galáctico. El libro está estructurado como un conjunto de relatos largos que suceden cada vez que se produce una «crisis Seldon», un conjunto de situaciones sociales, económicas y políticas cuya salida previó Hary Seldon con ayuda de sus ecuaciones. En cada uno de esos relatos, siguiendo la clásica estructura de planteamiento, nudo y desenlace, se presentan primero las condiciones sociales, políticas y económicas que generaron la crisis Seldon, después las personas que las resuelven y los cambios sociales que eso genera.

Aunque así dicho no suene tan interesante, la maestría de Asimov a la hora de plantear personajes, situaciones y aforismos, hace que su lectura sea absorbente, y que te enganche de una manera muy especial el devenir a lo largo de siglos de esta imaginaria galaxia llena de vida humana. Sin desvelar nada de la trama del libro, la inteligencia demostrada por gran parte de los personajes a la hora de enfrentarse a las tensiones sociales que les toca vivir es maravillosa. Escrita en el sencillo estilo tan característico de Asimov, el conjunto de ideas que contiene han inspirado y seguro que inspirarán a varias generaciones de científicos y tecnólogos, además de divertir a un montón de gente.

Después de leerlo, uno no puede evitar pensar en la posibilidad de descripción, más o menos determinista, de un gran conjunto de personas a lo largo del tiempo. No sólo me encantó el libro, sino que sus ideas me han dado incontables horas de pensamiento en torno a temas de historia, sociedad y economía que seguro no sería capaz de ver o pensar de otra manera.


(1) Si bien no existe nada parecido, Asimov dijo que se inspiró en las ideas fundamentales de la física estadística, donde la descripción de cada partícula individual no tiene sentido, sino la suma colectavi de sus movimientos para desarrollar la idea. De todas formas, hoy en día hay científicos estudiando cómo modelizar de manera general la historia humana. Tienen incluso una revista de investigación: Cliodynamics.

(2) No hay que confundirla con la rama de la psicología también llamada psicohistoria. Esta última pretende entender la historia humana desde una perspectiva de la psicología human individual, sin pretender en ningún momento realizar ningún tipo de predicción del futuro. El ariculo de la wikipedia sobre

(3) Si esta definición suena a la de la Wikipedia, eso es porque desde luego la idea tiene resonancias.