Según el último informe PISA, España está bastante lejos de los países que se sitúan en los primeros puestos, sacando a la luz las carencias de nuestro sistema educativo y los altos niveles de fracaso escolar.
Contrario a los resultados logrados en España, tenemos los resultados de Finlandia y Corea del Sur, que fueron los que alcanzaron mejores resultados de entre 65 Estados y territorios analizados en 2009.
¿Nunca os habéis planteado por qué hay tanta diferencia entre unos países y otros? A continuación os daré alguna pista.
Tanto el sistema educativo finlandés como el coreano son sistemas ejemplares. Yo me he centrado para parangonar con el sistema de España, el finlandés.
El sistema escolar en Finlandia es perfecto, los alumnos sacan buenas notas, no hay repetidores, el porcentaje de estudios superiores es del 34% de los adultos y sólo tienen una oportunidad para aprobar y sin copiar y el ratio es de menos de 20 alumnos por aula, por el contrario en España, casi la mitad de alumnos ha repetido alguna vez en Secundaría (43%), tienen varias oportunidades y algunas veces “copiando” y el número de alumnos, en muchas ocasiones sobrepasa la ratio.
Si hablamos del colegio, también es muy distinto al colegio español, allí todo es mucho más limpio, todo el material escolar es gratis, si un alumno quiere ser profesor tiene que sacar excelentes notas y el profesor siempre será respetado por sus alumnos, en cambio, en España, el colegio está mal cuidado, con pintadas en puertas, paredes, mesas etc., el material escolar hay que pagarlo, para ser profesor con sólo un 5 y medio puedes acceder a la carrera, no tienes que ser ningún genio y el respeto que le tienen sus alumnos va empeorando a pasos agigantados.
En definitiva, podemos observar una gran diferencia entre un sistema y otro, y como el estado finlandés se encarga de que el desarrollo educativo en su país sea lo más eficaz posible, y no sólo en el ámbito educativo, sino en el bienestar general.
Si es cierto que nuestro sistema educativo no es completamente malo, pero sería engañoso ocultar que existen numerosas deficiencias y no debemos ser pesimistas, porque el líder de puntuación en este informe que es Finlandia, era de los más mediocres hace años, por esto digo que debemos contender para superar obstáculos y afrontar adversidades que no nos hagan avanzar.
Cuando hablamos de fracaso escolar, en muchas ocasiones decimos que son los alumnos los que fracasan pero debemos ver todo el contexto que le rodea y centrarnos por tanto en la acción educativa. Los alumnos tienen dificultades pero no es lo mismo que fracasar, el fracaso bajo mi punto de vista no está en ellos, el fracaso está en la institución que no pudo ayudarle para que tuviera un aprendizaje seguro.
Un alumno por nacer en España no es más deficiente que otros niños nacidos en otros países, ahora bien, dónde está el problema… juzguen ustedes mismos.
María Camuñas Alameda