Imagina que un día de estos conoces a una persona y te pregunta: «¿qué estudias?». Tú, muy orgullosa, respondes: «Magisterio». La reacción que probablemente tenga sea: «Ah… si… pinta y colorea..», o «qué lista, así tienes más tiempo de vacaciones».
Actualmente en nuestra sociedad, esa es la reacción de la gente cuando dices que quieres dedicarte a ser maestra. Pero, ¿por qué estamos tan poco valorados?
Unos disfrutan haciendo análisis, otros haciendo programaciones de alimentación, otros trabajando en un laboratorio, pero nosotros disfrutamos EDUCANDO. Y no digo enseñar (que también lo hacemos), digo EDUCAR. Nuestra misión es formar a personas. Parece muy sencillo y de poco valor enseñar a un niño a decir «buenos días» al entrar en un lugar por las mañanas, a decir «adiós» antes de irse, a dar las gracias… Pero, ¿qué sería de esas personas el día de mañana si no utilizaran esas fórmulas en su vida diaria?, ¿si nadie les hubiera enseñado a comportarse cuando hay gente delante?, ¿si no supieran respetar el turno de palabra?.
Es muy sencillo decir que lo único que hacemos es cantar, pintar… pero yo pregunto: ¿Acaso a un estudiante de enfermería no le enseñan a poner una vía?, o a uno de fisioterapia ¿no le enseñan a dar masajes?. Pues que menos que a nosotros de vez en cuando nos enseñen canciones. Si tenemos que enseñar de una forma lúdica, ¿por qué no vamos a poder aprender a cómo enseñar?
Después de estos interrogantes con los que pretendo hacer reflexionar un poco sobre la labor del docente y su importancia en la sociedad, acabo con una frase de Kant que nos puede hacer pensar sobre lo importante que es la vocación en nuestro trabajo: «Tan solo por la educación puede el hombre llegar a ser hombre. El hombre no es más que lo que la educación hace de él».
Preciosa reflexión!Pues sí, yo también sueño con ser maestra, ya que estoy en mi último año de Grado de Magisterio de Eduación Infantil, esa profesión tan maravillosa, que unos vivimos con pasión y alegría, y como tu bien dices, para otros es una «profesionzucha» de poco valor, ¡qué pena!, pero que más da lo que los demás piensen, yo sé que es muy importante, y sobre todo es lo que me hace feliz, enseñar a pequeños que nos miran con ojos atentos, curiosos, llenos de vida, de brillo, que nos llenan con sus risas, sus palabras,…, esos niños, que entran siendo unos pequeñines, que apenas logran abrocharse su chaqueta, pero vemos cada curso con alegría y satisfacción como han ido avanzando y consiguiendo pequeños logros, …., a escribir su nombre, ese nombre que también te escriben en una notita con letras de colores en el que te ponen: profe, te quiero, y a mi eso me vale más que el mejor regalo del mundo, o ves como ese niño que apenas abría la boca, no para de hablar trabajando con sus amigos en equipo, y se piden las cosas por favor, y se respetan, y se ayudan…., pues si, esto y muchas cosas más se aprende en el colegio, y ojalá no se olvidaran, y siguiéramos respetandonos, trabajando en equipo…., y estas pequeñas personitas siguen aprendiendo año tras años de mano de muchos profesores que cada día ponen todas sus energías e ilusiones para formarles, educarles, y enseñarles a enfrentarse a la vida, esa vida cada día más complicada, y también, nosotros los profesores, seguimos aprendiendo cada día de ellos, porque los niños también nos enseñan, y mucho.… Y si, también tengo que decir que se aprende cantando, jugando, coloreando,…y quizás si aplicáramos más a muchos ámbitos de la vida, este pinta y colorea, este aprendizaje lúdico y significativo, divertido…, quizás, solo quizás, aprenderíamos mucho más…., porque mucho nos deberíamos contagiar de los niños, de su alegría, su energía, su optimismo, su buen hacer….Que profesor no ha visto después de años, a ese alumno/a que tuvo, que tanto le costaban entender los problemas, o que tanto le había costado leer en publico, ….ser un gran investigador/a, o ingeniero/a, o médico, o un gran pintor/a.., y sobre todo, una gran persona, porque eso eso es lo que al fin y al cabo de verdad cuenta, y…., que satisfacción el haber sido tú parte de ese aprendizaje. Bueno, aunque podría seguir hablando de lo maravillosa que es la profesión de Maestro/a durante largo rato, voy a cerrar mi comentario con tres preñas frases que me encantan:»Elige un trabajo que te guste, y no tendrás que trabajar ni un día de tu vida»»El mejor medio para hacer bueno a los niños, es hacerlos felices (Oscar Wilde)»No permitiré que nadie me diga que hay límites en el cielo, cuando hay pisadas en la luna»
los educadores con muy importantes en el aprendizaje y que bueno encontrar personas interesadas en relacionar su vocación y su profesión de la manera mas idonea