Con la campaña «Exijamos a los partidos un gran pacto de Estado sobre educación», Sincronía se hace eco de una demanda social cada día más generalizada. Desde 1985, España ha tenido siete leyes de educación. La que más tiempo duró fue la LOGSE, con 12 años de vida, y la que menos la LOCE, que no llegó a aplicarse nunca. Hay estudiantes que han pasado por hasta tres planes educativos distintos.
La comunidad educativa habitualmente ha sido mantenida al margen del debate y los profesionales han tenido pocas oportunidades de participar en la redacción de los distintos proyectos de ley. Los profesores apenas tienen tiempo de adaptarse a un plan, cuando ya entra en vigor uno nuevo, lo que impide su aplicación eficaz y mucho menos la valora
ción de resultados a medio y largo plazo.
El uso de la educación como herramienta política ha impedido que nuestro país tenga un sistema pedagógico perdurable en el tiempo, lo que se ha traducido en un fracaso educativo generalizado.
El número de estudiantes escolarizados hasta los 18 años no llega al setenta por ciento y la tasa de abandono escolar es el doble que la media europea. Además, casi un tercio de los jóvenes españoles entre 18 y 24 años abandona sus estudios sin finalizar la enseñanza secundaria.
Con la campaña, PACTO POR LA EDUCACIÓN, Sincronía quiere lograr la fuerza social necesaria para provocar un cambio real en el ámbito de la enseñanza en España.
Cada 20.000 firmas recogidas serán enviadas a los representantes de cada partido político.