Entendemos por tecnología todo aquel instrumento o herramienta que en su uso adecuado nos facilita y nos permite el aprovechamiento del conocimiento científico. Es difícil y casi imposible imaginar hoy en día una clase sin pizarras digitales, sin un proyector, una tele o un ordenador, ya que todos los centros escolares van equipados con estas y otras muchas tecnologías. También debemos tener en cuenta que a día de hoy muchos de los alumnos, por no decir todos, tienen un Smartphone a su alcance a cualquier hora del día.
En los últimos años se han desarrollado y se siguen desarrollando nuevas tecnologías y al parecer, seguirán haciéndolo por mucho tiempo, pero la preguntas que nos hacemos son; ¿Es buena la tecnología?, ¿Qué efectos tiene su uso en el aula?, ¿Mejorará o facilitará el acceso al conocimiento en realidad?
Empecemos por el principio, ¿Es buena la tecnología?, en mi opinión, un poco condicionada ya que soy un poco fanático, la tecnología no es sólo un medio para acceder al conocimiento, sino que también es un gran medio para desarrollarlo, eso sí, siempre sabiendo el uso que se hace de ella.
Internet, por ejemplo, es una gran red donde compartir todo tipo de archivos y documentos pero puede tener un doble filo si no se sabe utilizar. Por una parte tiene beneficios como el autoaprendizaje, el poder compartir archivos instantáneamente con cualquier persona del mundo, el poder de acceso a información de la manera más sencilla. En resumen, es un gran medio de aprendizaje y telecomunicaciones, pero ¿Y si el uso que se hace de ella no es adecuado? En este caso podemos encontrar muchos problemas, se puede poner en peligro la interacción social si se está enganchado, el uso continuado y sin descanso puede provocar dolores de cabeza y problemas en la vista, si no se tiene el suficiente cuidado puedes ser engañado por otras personas que lo utilizan para sacar algún beneficio, puede provocar problemas de atención. Por todo ello, para poder concluir si la tecnología o Internet, son beneficiosos o perjudiciales para el desarrollo del conocimiento y el aprendizaje, necesitamos saber cuál es el uso que se hace de ellos.
Para contestar a la siguiente pregunta, ¿Qué efectos tiene su uso en el aula?, dejaremos un enlace a un vídeo de Youtube (http://www.youtube.com/watch?v=7-WVZNW7amE) titulado “La educación dentro de 99 años”, el cual servirá como ejemplo. Las nuevas tecnologías crecen exponencialmente según pasan los años y su uso en el aula puede facilitarnos el trabajo tanto a profesores como alumnos.
El desarrollo de estas tecnologías puede facilitar al profesor tanto a la hora de explicar cómo a la hora de evaluar. En el vídeo anterior, podemos ver como la profesora evalúa los conocimientos adquiridos por los niños instantes después de haber explicado la lección. Esto permite al profesor una mayor libertad y una mayor cantidad de tiempo para avanzar en el temario, ya que no tendría que hacer tanto hincapié en la atención individualizada a cada alumno. Además de facilitar esta parte del trabajo, también se simplifica la hora de la explicación. No es realmente una simplificación, sino una intención de que el alumno interactúe de una manera más sencilla con el conocimiento y, por lo tanto, más amena para él. En el proceso de aprendizaje utilizando las nuevas tecnologías, el alumno también se ve beneficiado. Como ejemplo de esta afirmación podemos poner al libro de texto, el cual, ha sido y es un gran medio de acceso al conocimiento, pero es limitado. En cambio en Internet podemos encontrar acceso a todo tipo de información en el momento en que lo deseemos y con tecnologías como las del vídeo podemos hacer que el alumno interactúe y se llegue a interesar él mismo por el tema que se esté tratando.
Por último, comentaremos la tercera pregunta propuesta al principio de este texto, ¿Mejorará o facilitará el acceso al conocimiento en realidad? Todos sabemos del poder que tiene internet y la importancia que tiene la información que a través de él se maneja. El resultado del aprendizaje que se obtiene mediante Internet está condicionado por el uso que de él se hace. En Internet podemos encontrar anuncios y páginas no deseadas para nuestros alumnos e hijos y que realmente pueden ser un problema si no se sabe utilizar bien este instrumento de acceso al conocimiento o si no se sabe realizar una búsqueda de manera adecuada. Para este tipo de problemas, en mi opinión hay dos soluciones, la primera, acostumbrar y enseñar a los niños a utilizar de forma correcta las nuevas tecnologías que se les permite usar, y la segunda, utilizada tanto por padres como por centros, es la de controlar y administrar las páginas a los que se desea que los alumnos no accedan. Para este último consejo, detallaremos a continuación unas direcciones que ayudan en este aspecto:
José María Lázaro-Carrasco Rueda 2º Primaria A