MAESTROS SUSPENSOS EN PRIMARIA

«Maestros suspensos en primaria» es el titular de uno de los artículos publicados en el periódico «el país» el 14/03/2013. Y es el tema que he escogido para hacer una pequeña reflexión.
En primer lugar, hay que reconocer que el Plan de Estudios del grado de Maestro, al igual que los anteriores Planes, tiene grandes carencias. En el grado de Maestro se da un poco de todas las materias, el resultado de esto es que sepamos de todo un poco pero que no sepamos de nada mucho. A diferencia de cualquier otra titulación como puede ser Ingeniería, Veterinaria,… que exigen alcanzar unos contenidos más específicos en ciertas materias.
En segundo lugar, ¿Quién está seguro de que no erraría preguntas sobre algún tema que hemos estudiado en múltiples ocasiones? Creo que si ahora a cualquiera de nosotros nos pusieran un examen con preguntas sencillas de contenidos de primaria, muchas de esas preguntas las fallaríamos, ¿o no? ¿Quién es capaz de acertar por qué provincias pasan los ríos Duero, Ebro y Guadalquivir?
Con esto no justifico que no se sepa. Claro que un profesor debe alcanzar unos conocimientos, como mínimo los que en un futuro enseñará a su alumnado. Y a tener en cuenta también que son maestros que se han presentado a  unas oposiciones que se supone que han estado preparando.
Pero tampoco hay que olvidar que la cantidad de información que se maneja en la actualidad no es comparable a la de épocas pasadas. Con esto quiero decir que también habría que dar importancia a saber acceder a dicha información, saber distinguir entre fuentes más fiables y menos, saber sacar conclusiones… en definitiva adquirir ciertas habilidades que antes no se tenían en cuenta y que ahora son imprescindibles.
Para concluir, ¿Estás de acuerdo con la forma en que se ha dado la información? O ¿Crees que se han aprovechado de esto para llevar a cabo objetivos ocultos? Creo que está bien que se dé a conocer esta información para que conozcamos y podamos juzgar lo que está pasando. Pero, también creo que han aprovechado la situación para cambiar las reglas que se seguían para la obtención de plaza. Y además degradar, aun más de lo que está, la labor de los docentes y destruir la confianza que se debe tener en ellos, cuando estos se merecen y necesitan de la confianza de padres y, sobre todo, la de los alumnos.
EVA MARTÍN DELGADO
2ºA EDUCACIÓN INFANTIL