es vida que respiro con sosiego,
no sé, … quizás por haberte encontrado.
Buscaba fin a un mundo que reniego:
hondo dolor al borde del abismo
como soledad en silencio ciego.
Cierto deseo, ¡sólo un espejismo!
es inútil un esfuerzo personal,
sórdida lucha contra el vandalismo.
Chocar siento al alma sentimental
con gran confusión de ideas difusas,
hoy deseo un buen estado gradual.
donde está el palpitar adormecido,
donde gloria el amor sin excusas…
Es lugar en que estaría escondido
mi ser con suave brisa del euro,
como yace el cuco en refugio al nido.
Fogoso ardor hallé en paraje oscuro
sin importar el lugar si allí estabas,
recibo tu huída siéndome duro…
Gozar y soñar cuando me abrazabas,
salvar mi existencia sin tu presencia,
cesar amargor si no me besabas.
Hender leve herida, cuna en tu ausencia,
ardua fisura irrumpiendo mi pecho
apiada al consuelo sin tu apariencia.
Inesperadas caricias en lecho…
con tan sólo tu recuerdo en mi mente
mi corazón no queda satisfecho.
Jóven aunque convencida y prudente
quedé enamorada de tu persona:
noble, sincera y despertada mente.
Káiser en mis sueños y me abandona
en mi morar, lenguaje del amar,
toda luz de esperanza y te perdona.
¿Las lágrimas dónde van a parar:
a la angustia de nuestra soledad
o crees que su curso irá hacia la mar?
Llorar por clara y sincera amistad
que al igual que un día se ausentó vino,
un llanto enraizado en profundidad.
Mi interior en cerrado desatino,
muy frágil y muy débil por tu ida
envuelto en suave papel cristalino.
No busco la fama sino la vida,
un gran sentimiento y amor profundo,
no hallar mi nueva inesperada huída.
Ñuto mi corazón en este mundo
se enamora de gestoso detalle
y decae impávido en raudo segundo.
Ósculos soñados en jovial valle,
dudo si volveré a ver tu mirada;
advierto íntima voz , dice que calle.
¿Por qué? No existe respuesta. Es -nada-.
¿Quizás tan inevitable sería
volver a la primavera pasada?
Qué evidencia: tu faz me sonreía,
guardaré tu simpatía y confianza.
Qué ironía: hoy siento melancolía.
Rescatar momentos es mi esperanza
sin perderme en tenebroso silencio,
queda tener paciencia con templanza.
Sólo sentir en susurros el silencio,
tu anhelo constante y no pasajero,
sólo sentir suspiros del silencio.
Te quiero, te quiero porque te quiero,
aportemos en segunda ocasión
dos almas en un corazón sincero.
Único latir, pecado y perdón,
descubrir con la razón luz de amor
y al unísono ceñir la pasión.
Vacío oscurece en fondo interior,
el error baña tu impresión incierta
si vacíos ves mis versos de amor.
Whisky y más alcohol … – permanece alerta:
son evasivas que están por de más;
mi ser huye despacio por la puerta.
Xilófono y laúd, bajo al compás …
la música que escucho sin sentir,
notas sin sentido si tú no estás.
Y aún hiriendo mi hondo sentir
no irán volando con viento perverso
estas palabras que son mi vivir.
Zumo de amor, lejos de mi universo,
que fluía en mis venas encantado…
anhelo tus besos en cada verso.
Olga Velasco Gallardo (Tercero de Ed. Física)
Foto tomada de: http://rescuedreams.jubiiblog.com.es/upload/hada%20recordando.jpg